Pilates en el embarazo: si ya conoces los pros, estos son los contras

Para cuando leas este artículo es probable que ya hayas leido varios sobre las bondades del método Pilates durante el embarazo y estés entusiasmada por empezar. Pero también es necesario que tengas en cuenta los casos en los que no se recomienda este ejercicio en las embarazadas.


La primera advertencia sobre el método Pilates es que no debe realizarse durante los primeros tres meses de embarazo, salvo aprobación de tu médico, tener pleno dominio de lo que los instructores denominan centro de energía y bajo estricta supervisión.


Hay algunos casos en los que se puede realizar, pero con control y supervisión médica preventiva. Por ejemplo si tienes molestias o dolores musculares u óseos, hipertiroidismo o hipotiroidismo, anemia, contracciones uterinas, entre otras dolencias.





Hay otros casos en los que de ninguna manera debes realizar el método Pilates durante el embarazo, como la existencia de abortos previos en tu historia clínica, sangrado, placenta previa, diabetes materna, riesgo pulmonar o cardíaco, hipertensión, entre los más destacados.


Por eso, si estás embarazada, es muy importante que consultes con tu doctor y te realices los exámenes médicos que él te indique para descartar cualquier riesgo. Así podrás recibir los beneficios del método Pilates sin temores y siempre con la guía adecuada de un especialista.

Más información sobre los riesgos del Pilates: PrestonPilates.co.uk.
Más información sobre los beneficios del Pilates: ElEmbarazo.net.

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