Pulsera electrónica para evitar cambio de bebés al nacer

Las noticias sobre bebés cambiados al nacer, ya sea intencionalmente o por negligencia, aparecen con demasiada frecuencia en los medios de comunicación. Pero la realidad, especialmente en los países en desarrollo, es mucho peor; es cosa de todos los días.


La idea de que un niño haya vivido una vida ajena sin que sus padres lo descubran sino muchos años después, o que sabiéndolo tengan que luchar intensamente para lograr justicia, es sencillamente terrible y le sucede a más gente de lo que podríamos imaginar.

Afortunadamente, una empresa de tecnología de punta española ha propuesto una novedosa solución: la adaptación de un brazalete para la identificación neonatal. Se trata de un  lector electrónico que registra las huellas dactilares y otros datos, tanto de la madre como de su bebé, en la misma sala de parto.

La identificación del bebé se realiza a través de la tecnología biométrica y de radiofrecuencia. Además, el dispositivo puede transmitir todos estos datos directamente al Registro Civil con lo cual se establece la relación materna y las identidades con mayor exactitud, reduciendo las posibilidades de una confusión posterior.





La ventaja de este sistema frente al tradicional están en que se evita el deterioro de los datos escritos manualmente con tinta, debido a los diversos líquidos del parto que pueden afectar la claridad de los datos. El almacenamiento digitalizado de estos datos también hace inútiles la rotura y cambio intencional de los brazaletes.

Por otro lado, al ser registradas las huellas de manera electrónica, la precisión es mayor, incluyendo el registro del médico responsable de la operación y de la labor administrativa.


El dispositivo cuenta con funciones adicionales, como alarma en caso de manipulación o pérdida, rastreo tanto de la madre como del bebé en tiempo real y enlace con el sistema de información del hospital.

Muchos países ya cuentan con esta tecnología, mientras que en otros está en plena implementación en sus procedimientos médicos. Los primeros reportes ya dan cuenta de su gran efectividad en velar por la seguridad y el futuro de los recién nacidos.



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