Los tesoros que guardan los niños en su habitación

Tras la puerta de la habitación de un niño se esconde un mundo distinto, donde todo cambia de uso. Los niños hacen que cada objeto que cae en sus manos cobre vida y protagonice su propia aventura. Pueden ser simples para nosotros, pero para ellos ocupan un lugar muy importante en su dormitorio y en sus vidas.



El aparente caos que cada día les ordenamos arreglar, resulta tener muchas veces su propia lógica. No estamos diciendo que les dejemos ser desordenado, pero sí que tengamos en cuenta que la noción de orden puede variar con la edad.

En la habitación de mi hijo sucede lo mismo. Al entrar hoy,  me percaté que lo que yo veía como basura estaba cuidadosamente colocado y agrupado en un espacio definido de su mueble. Entonces comencé a observar objeto por objeto. Cada uno tenía distinto origen, había sido utilizado en diferentes juegos y cumplía una función única. Haciendo un esfuerzo por recordar, comencé entonces a reconocer la importancia de cada uno para mi pequeño. De ello resultó una lista con los tesoros más valorados por mi hijo:

Una máscara hecha con cartón reciclado

La creó de una cartulina que no servía, trazó sus contornos, cortó con tijera (ayudado por papá en los ojos y en los hoyos del elástico). No se conocen las razones por las que tiene una sola oreja; tal vez alguna influencia artística.

Reloj con cara feliz y pelotas de fútbol

Cuando las manecillas avanzan, las pelotitas suben y bajan. Muy creativo, pero en la noche el tic-tac era insoportable. Conversamos sobre el tema y decidimos usar el reloj...¡cuando haya tiempo!

Radio portátil

Hay que tener una precisión milimétrica para sintonizar en él las estaciones y para que el volumen no se vaya del piso al techo con tan solo rozar el botón. Duró más de lo previsto en sus preferencias, y aunque hoy lo usa para todo menos para escucharlo, lo mantiene en un lugar privilegiado de su mundo.

Rollo de papel tisú suave

Su hermana tenía uno, así que él también quería el suyo. El rollo está intacto.

Lata roja de chocolates

De todo, menos intacta. Era para invitar a papá y mamá, quienes además - él más que ella - cogían uno que otro en ausencia del dueño. Aun así, duraron bastante. Hoy solo queda uno....mejor iré a comprobarlo.

La casa verde

Manualidad hecha con trozos de cartón y espuma. Al recogerlo cierto día del jardín, salio brincando emocionado para enseñármela.

Lentes de buceo

En las clases de natación resultaron ser un estorbo, pero en casa se convirtieron en el nuevo accesorio para jugar a Ironman con papá.

Teléfono móvil

Primero fue de la tía, luego de mamá y luego de él. Ahora solo recibe llamadas y ha hecho de mi hijo un campeón de Fórmula 1. Los gráficos del juego son bastante simples, pero la emoción ante cada "Excellent" que aparece en la pantalla es desbordante. Viene con su cargador, por supuesto.





Linterna roja

Le encantaba usarla para iluminarle el ojo a su hermana. Se le explicó que eso le podía hacer daño y que mejor la usara para hacer figuras en la pared. Su sorpresa y la de todos fue enorme al descubir la imagen proyectada del hombre araña, trepado en la pared. Ahora es una poderosa arma láser.

Hay otra linterna más pequeña y transparente, (en la foto, junto a los lentes de buceo). Pero la cantidad de veces que papá ha tenido que rearmarla, incluyendo las pilas, es demasiada.

Perfumes de Cars (azul y naranja)

Infaltables a la hora de salir al colegio. Prefiere el azul, pero parece que le gusta la combinación de colores de ambos sobre su cómoda porque no guarda ninguno.

Pedazos de boletos de autobús

Son los malos. Atacan por cientos de miles a los buenos que los repelen con sus vientos huracanados, fuerza de Hulk y puño de roca.

Alcancía de Superman

Reciente obsequio de cumpleaños. Recibió los fondos transferidos desde su anterior bóveda, hecha con bloques de Lego.

Lámpara acuática

Vio una en casa de su primo... y vio la luz. La de su primo parecía tener sumergidas en agua burbujas de goma roja que subían y bajaban, se pegaban y despegaban. Desde entonces no dejó de pedirlas para su habitación. Hasta que llegó el día. Hoy tiene una con peces de colores, pero nunca la enciende.

Lápiz de doble punta hecho con madera reforestada

De esos gruesos y con bordes triangulares, para los niños que empiezan a escribir. El ya sabe, pero igual le gusta.

La caja (fuerte) del pato

Contenido ultrasecreto. Sin embargo, hemos logrado obtener el permiso del propietario para divulgar algo de su contenido: un gancho de ropa, un jabón de hotel, un recuerdo de bautizo, un dije de angelito, una canica, una muestra de perfume, un borrador, una crayola roja, un tornillo y trozos de plastelina seca.

Bandera de papel

La hizo en el jardín para celebrar el Día Mundial del Niño. Desde entonces la mantiene izada en su portalápices.

Un calcetín con personalidad

Solo bastó coger un calcetín o media vieja, pegarle un par de ojos y pintarle la boca con plumón rojo para darle vida. Se llama Jacinta y es una gusanita muy inquieta. Su dueño la usa como títere y para hacerle cosquillas a mamá en la nuca.

Imagen de la Virgen

Pequeño regalo de bautizo. Una heroína con armadura de plata fijada sobre madera.

La habitación de nuestros hijos es un universo fascinante. Permitamos que lo organicen manteniendo un orden razonable que le de un lugar a sus fantasías y a su forma de ver la vida. Cada parte de él es un tesoro de verdad y de riqueza incalculable para su desarrollo personal. Respetémoslo.


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